Una misión que empezó en 1999 después de la guerra y que cambia cada seis meses de rostros pero no de objetivos. Cada seis meses llega a Istok una nueva agrupación militar española para encargarse de la seguridad y el control de la zona. En un principio limpiaron el territorio de minas antipersonal y desmilitarizaron al Ejército de Liberación de Kosovo (UCK). En estos momentos son los profesores de la futura policia kosovar compartiendo con ellos controles de carreteras. Deben vigilar en todo momento que no se comentan abusos contra las etnias minoritarias como en Istok son los serbios, los bosniacos o los gitanos.
7 años de duro trabajo que se ve recompensado por el cariño de la población. Todas las etnias respetan el trabajo de los militares españoles. Es sorprendente observar como los niños se han acostumbrado a ver las tanquetas de los militares paseando por sus calles. Por un lado es triste, las personas más inocentes del mundo comparten juegos y vida con un arma. Por otro lado satisfacción, los niños te reciben como a un Rey Mago eres parte de su vida y les has salvado parte de ella.

¿Y cuando se acabará la misión? El Director General de Politica de Defensa de la OTAN en España, Benito Raggio, asegura que el final esta lejos porque el embajador de Naciones Unidas encargado de redactar el Estatuto Final de Kosovo esta encontrando dificultades. Raggio afirma que conseguir un Estatuto final es imprescindible pero hasta que eso no ocurra no se podrá reducir la presencia militar en la zona. Es decir, no se habla de abandonar Kosovo sino de ir reduciendo a largo plazo el número de militares.
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